miércoles, 14 de enero de 2009

ME DUELE EL MUNDO.

“Yo os dejo este mandamiento:
Amaos los unos a los otros.”
Jesús de Nazaret.
Cómo no va a dolerme el 11 de septiembre.
Ya me dolía Hiroshima, Nagasaki, Viet- Nam,
El Apartheid, las envestidas del quebranta huesos
Y los ataques de las transnacionales.
Los muertos en Camboya,
Las masacres de Ruanda,
El genocidio en Chile y Guatemala.
Las muertes colectivas que nadie quiere pronunciar.
Eso también me duele.

Me duelen las mentiras.
Las dos Guerras Mundiales,
Los muertos del Golán, Sabra y Chatila.
¿Cómo no va a dolerme mi dolor?
Por eso me duele el 11 de septiembre.
Y me duele también la indiferencia
De los que invaden y destierran los pueblos.
Me duele y sufro la muerte en cualquier parte.
El hambre y la miseria con las que los de arriba
Someten los de abajo.

Me duele el mundo.
Es justo que me duela.
Que grite mi dolor y que proteste,
Cuando el poder descarga su rabia fratricida
Y nos hacen creer que con las armas,
O que matando a este o a este otro,
La paz reinará sobre el planeta.
Eso también me duele, como los fogonazos
A las Torres Gemelas.

Me dolían y me duelen los grandes genocidios
Donde caen tantos inocentes.
Me duele Palestina.
El exilio y el hambre,
La indefensión a las que nos condena la pobreza.
Y los miles de hombres que se echan al mar,
Sólo con la esperanza de alcanzar la otra orilla,
Donde los pisotean y los echan atrás,
Más pobres y más huérfanos,
Que el día que la pobreza los mordió
Y los dejó sin piel a la intemperie.

Me duele África entera,
Segregada, saqueada, rota y avasallada,
Porque su gente es negra y luminosa.

Me duele el Sur,
De donde el Norte se abastece.
Me duele el Norte,
Por sus guerras de vientos y rapiñas.
Toda la humanidad me está doliendo,
Antes y después del 11 septiembre.

Es un dolor sin fecha mi dolor.
Humano, universal; apocalíptico,
Que se me fuga por los dorsales de mis sueños.

Mi dolor es global y ponderable,
Como la plenitud y los deseos.

En todos los rincones nos asecha la muerte.
Eso lo saben todos los gobiernos,
Y las transnacionales y los bancos,
La KGB, la CIA, Scotland Yard,
Al Qaeda, la Mafia etc. etc. etc...
Si yo lo sé,
¿Cómo es que ellos no lo van a saber?

Eso también me duele;
Que se olviden del mundo
Y de tantos conflictos que hay en él.
Que cada día seamos menos libres,
O que la democracia,
Ahora sea un barquito de papel,
Que navega en un mar de sensaciones,
Vigilada hasta en sueño, sola y a la deriva;
Como el Arca de Noé.
Todo eso me duele.
Ya me dolía la Torre de Babel,
Como los clavos, en los pies del Cristo.

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