CON LAS FLORES DEL BIEN, POR SI ACASO.
Si Baudelaire viviera.
Si Charles Baudelaire siguiera vivo,
Con su voz de poeta y su ancho pantalón de casimir.
Si no se hubiera ido para siempre
Hacia el cielo imborrable de París.
Si su madre lo hubiera consolado
Y su amante le hubiera sido fiel,
O si su padre lo hubiera llevado de la mano,
A lo mejor, Las flores del Mal no existirían
Y la visión del hombre seguiría dormida en un rincón.
Pero el verso es más fuerte que la muerte
Y el silencio, quizás, como el camino,
Es la cantera de todos los misterios.
Si Charles Baudelaire,
No se hubiera escapado de su infancia,
Y hubiera permanecido acurrucado,
Bajo el chal espumoso de su madre
Y los ecos de mando del padrastro,
Estoy seguro,
Que hoy las noches serían más oscuras,
Porque la luz, apenas se hubiera levantado de su sitio.
El misterio es así; redondo y montaraz como la vida.
Las noches y los días, en el alma sin glosa del poeta,
Vuelan sobre los picos, de destello en destello,
Hasta hacerse centellas,
Huracán o relámpago, en los sueños del hombre.
Sé que cada palabra es una cruz,
Cada voz, un himno que comienza
Y que en cada mirada
Se abre un despertar frente a las sombras.
Sé lo que significa un estrechón de manos,
Un abrazo, un te quiero… una sonrisa.
Y sé también, cuánto nos duele a todos,
Dejar atrás las cosas que se aman.
Aquí me quedo yo, frente al misterio,
Con Charles Baudelaire y sus preguntas,
Empujando la puerta de salida,
Bajo el cielo imborrable de París.
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1 comentario:
Para ti Mandy
Y sé que cada uno de tus versos
es un mesterio a medias
que incita a seguir investigando.
Me encantan tus últimos poemas que vas dejando aquí.
Un abrazo muy fuerte
Luz
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